Columna. Directora regional de Sernatur Biobío, Natalia Villegas Castro.
La expansión del Coronavirus en todo el mundo ha constituido una auténtica catástrofe para el turismo. No hay viajeros, las líneas aéreas han paralizado sus flotas, los cruceros y transportes terrestres están ociosos y los operadores, las agencias de viaje y los hoteles -en su mayoría-, están cerrados por la falta de clientes.
La historia nos muestra que el turismo es muy resiliente, incluso en situaciones catastróficas; es por eso que debemos cultivar la paciencia, empatía, solidaridad y prudencia, ya que serán meses complejos, pero estamos realizando un ingente esfuerzo como equipo, para reactivar la actividad turística en la región del Biobío.
Considerando la dinámica actual, podemos asumir que en tiempos de crisis el turismo se debe reinventar.
Si las personas no pueden ir a los locales comerciales, usemos la tecnología para que el servicio o producto llegue al hogar de cada consumidor.
Como las personas no pueden visitar los hoteles, esta sería una oportunidad extraordinaria de que los mismos demuestren si sus políticas de responsabilidad social son auténticas.
Se prevé que se optará por visitar destinos cercanos, situación favorecedora para rescatar las tradiciones e historia de cada rincón de nuestra región, los que podemos hacer familiares y promocionarlos utilizando herramientas digitales.
Si la actividad económica no dinamiza el negocio turístico, la empresa debe generar negocio y una cierta actividad económica en su entorno. Si los empleados no pueden ir a la empresa, se puede realizar el teletrabajo y estimular la formación online, con idea de reforzar la competitividad y retomar los tiempos individuales para conectarse consigo mismo y potenciar la unión familiar.
Si un destino no es percibido como seguro, se deberá establecer como uno que sí lo sea, ya que será un atributo cada vez más valorado por el turista en su decisión de visitarlo.
Asimismo, se deberá trabajar en conjunto con el sector privado y público para establecer un concepto de destino turístico inteligente, que no sólo consideren los conceptos de vanguardia e innovación, sino también, apelen a la salud y seguridad.
No será fácil reinventarse, pero eso mismo marcará la diferencia entre quiénes sean capaces de hacerlo y quiénes no.
Son tiempos para aprovechar las nuevas oportunidades, porque tal como decía Peter Drucker, “el emprendedor siempre busca el cambio, responde a este, y lo explota como una oportunidad”. De ti depende aprovecharlas.